Historia
PLH® nació en 2005 de un desafío: el de Enrico Corelli, propietario de Epic, empresa líder en el sector de la ingeniería de instalaciones, de dar un aspecto estético “lujoso”, identificativo y personalizable a la placa eléctrica de control, hasta entonces ignorada por el diseño porque se consideraba un factor secundario en la decoración y el diseño de interiores.
El proceso de dar belleza, así como funcionalidad tecnológica, a la placa eléctrica fue largo, apoyado por una investigación curiosa, apasionada y continua que abarcó muchos aspectos de diseño y producción: desde la experimentación en profundidad sobre los materiales y su comportamiento hasta una selección meticulosa de proveedores dispuestos y capaces de adoptar los principios de la empresa; desde la creación de los primeros prototipos hasta su ingeniería y producción con máquinas CNC.
Sin olvidar la atención a la ergonomía para hacer fácil la instalación y seguro el uso de la placa, así como la creatividad destinada a darle un plus estético y convertirla en un objeto decorativo a medida en formas, dimensiones y acabados, capaz de responder a las necesidades particulares de cada cliente y usuario.
empresa de demostración
Como explica Corelli, “la placa PLH® no se esconde, quiere ser vista, percibida como un valor añadido del diseño de interiores, una calidad que la hace única”.
Todo interpretado en el espíritu de los valores fundadores de la marca como la excelencia cualitativa, la belleza formal, la durabilidad y la fiabilidad, la atención al detalle, la sostenibilidad del ciclo de vida de los productos. Una serie de desafíos dentro del desafío que han llevado a PLH® a trabajar con jóvenes profesionales italianos con talento que han puesto a disposición su know-how específico, y a contar con el genio y la experiencia de su fundador.
Formado como experto industrial y gran amante del arte y de las artes decorativas y aplicadas, Corelli sigue desarrollando esa actividad de diseño eléctrico en general y de automatización de edificios en particular gracias a la cual ha tenido la oportunidad de entrar en contacto con arquitectos de renombre internacional, lo que le ha ayudado a ampliar y profundizar su visión proyectual y le ha inculcado el deseo de probar suerte en el diseño de productos, abordando primero el tema de las luminarias y luego, precisamente, de las placas de control eléctricas.
“ Al principio de mi carrera profesional, trabajando como ingeniero de sistemas en estrecho contacto con profesionales de primer nivel como Michael Gabellini, me apasioné por el arte y la arquitectura de interiores y me di cuenta de que la técnica es un fin en sí misma si no puede expresar armonía y belleza. Y para ello se necesita diseño. Esto se aplica a todo, incluso a los sistemas eléctricos y sus elementos visibles, como los paneles de control”, afirma.
“Con Gabellini y Sheppard”, continúa Corelli , “tuve la suerte de trabajar en los espacios de Jil Sander en Milán (1995), así como en el Mall Manzoni, 31 de Giorgio Armani (1999), para el que también me encargué de la iluminación y de todos los sistemas eléctricos y electrónicos. Dos experiencias muy formativas que me permitieron crecer como hombre y como técnico”.
El primer resultado de este enfoque que fusiona tecnología y diseño fue, en 2005, la línea MakeUp. Posteriormente, el catálogo de PLH® se enriqueció con otras cuatro colecciones, cada una portadora de su propia especificidad estética : Skin (2010 y aún en expansión), Slim (2011), Keyboard, profundamente renovada en 2020, y Neo (2012): una serie de pequeñas obras maestras cuya creación ha activado efectivas colaboraciones “artísticas” con prestigiosas marcas de renombre internacional como Jannelli & Volpi, Kvadrat, De Castelli, Antique Mirror, Mutaforma, Haute Material y SAI Industry y la Scuola Orafa Ambrosiana.
Además, en 2017, a las placas de control manual se unieron las conectadas en modo inalámbrico, que son los elementos constitutivos del sistema PLH® Aria, a su vez también gestionables manualmente para dar soporte a un gesto físico que el usuario sigue amando.
Un repertorio excepcional que, gracias a una serie casi infinita de texturas y acabados entre los que se encuentra el PVD antibacteriano Abaco®, se demuestra día tras día cada vez más adecuado para conferir un toque distintivo y lujoso tanto a residencias privadas como a la arquitectura pública y corporativa.
El proceso de producción
Desde el punto de vista productivo, el elemento característico de todas estas colecciones es la elaboración de láminas macizas de acero inoxidable 316L, latón, aluminio 6082, cobre y DuPontTM Corian®, mediante una única operación mecánica realizada con máquinas de control numérico, CNC.
La elaboración de los productos sigue una cadena de producción certificada, trazable y rigurosamente made in Italy, desarrollada tras una atenta selección de sus actores.
Para cada fase y tipo de elaboración, PLH® y su personal, con el fin de garantizar el mejor resultado final en términos de calidad y acabado, recurren a especialistas y empresas altamente competentes en los distintos sectores productivos implicados.
Se trata de un camino empresarial que cuida al máximo el impacto medioambiental y que como resultado final ofrece una gama de colecciones personalizables dirigidas a un nicho de clientes amantes de la belleza y el lujo bien cuidado.
El trabajo comienza y toma forma en la Oficina Técnica de PLH® con la preparación y gestión del pedido, el prototipado rápido y la optimización del proceso.
Las siguientes tareas son realizadas por técnicos y trabajadores de probada competencia:
procesamiento mecánico con centros de trabajo CNC de 3 o 5 ejes;
Marcado pre o post tratamiento con láser o plotter con barnices UV;
Acabado superficial: arenado, satinado, pulido, pulido en caliente;
Tratamiento superficial: pintura, anodizado, galvanizado, grabado ácido, PVD;
personalización , por ejemplo mediante el uso de diferentes materiales de recubrimiento (colección Skin) ;
la asamblea;
pruebas y control de calidad;
Embalaje con embalaje patentado PLH®.